El valor de la segunda oportunidad

Publicado el 14/10/2025
Agustinos


Texto: Pilar Garrido
Música: Walk in the park

Hoy 14 de octubre se celebra San Calixto I, que fue Papa y mártir. Me ha parecido que su historia es muy interesante, aunque vivió en la época de los primeros cristianos, no es muy diferente a la nuestra, porque lo que defendía sigue teniendo mucho valor hoy en día.

San Calixto nació en Roma, más o menos en el año 160, y tuvo una vida muy complicada desde el principio. Fue esclavo y lo acusaron injustamente de haber malversado dinero de su amo ¿Os suena? Por eso lo castigaron enviándolo a trabajar a las minas de Cerdeña, donde casi nadie sobrevivía ¡Menudo castigo! Aun así, tuvo suerte: una mujer influyente pidió su libertad y consiguió que lo dejaran salir. Cuando volvió a Roma, empezó a trabajar para la Iglesia y se encargó de cuidar un cementerio cristiano, las Catacumbas de San Calixto, que a lo mejor alguno de vosotros las ha visitado. Yo si, con mi familia y con mis compañeros de la Uni, con los que tengo una anécdota y fue un momento de verdadero pavor, son inmensas y durante un rato creímos que nos habíamos perdido, ¡¡Que susto!! Pero no me quiero desviar de lo que realmente importa en la vida de Calixto…con el tiempo fue elegido Papa. Durante su tiempo como Papa, defendió algo que no era bien visto: decía que todos merecen una segunda oportunidad, incluso los que habían cometido pecados graves. Muchos lo criticaron porque pensaban que estaba siendo demasiado blando, pero él creía de verdad en el perdón y la misericordia. Murió mártir, por mantenerse fiel a sus ideas.

Lo que más me gusta de su historia es que se puede aplicar perfectamente a cosas que nos pasan hoy. Muchas veces somos muy duros con los demás: en el colegio, en el trabajo y sobre todo en la impunidad de las redes sociales, insultamos y juzgamos sin conocer la verdad. Nos cuesta perdonar o entender que todos somos distintos o podemos cambiar. San Calixto nos recuerda que todos nos equivocamos y que dar una segunda oportunidad al otro, puede ayudar a cambiar, a mejorar o a que el otro se sienta apoyado y a nosotros mismos para pensar en cómo tratamos a los demás. Su ejemplo invita a ser más comprensivos, a perdonar y a no cerrar la puerta a quien se ha equivocado. Lo que él defendía, el valor del perdón y la empatía, sigue siendo algo que necesitamos mucho hoy. No solo dar segunda oportunidad a las cosas con lo que esta tan de moda de la economía circular. Lo verdaderamente importante, es dar setenta veces siete oportunidades a tu hermano.