Orando con San Agustín

Agustinos


“Glorificar a Dios vale lo mismo que darle gracias. Y, verdaderamente, ¿hay algo peor que, siendo criado a imagen de Dios, serle a Dios ingrato?  (Sermón 126, 6. VII) 

Hoy el cielo me ha brindado

banda azulada y morada

sobre tenue nube cárdena.

Mi pensamiento, extasiado,

medita en la maravilla

de las nubes y el color.

Y me pregunto enseguida:

¿Quién ha sido su pintor?

¡Oh pequeñez del humano!

¡Grandeza del Creador!

                        Nazario Lucas Alonso