Cerrando caminos

Publicado el 12/04/2022
02:58 min. | 24 visualizaciones

 

 

 

 

 

TÍTULO: FINALIZANDO LA CUARESMA; CERRANDO CAMINOS

AUTOR: P. PABLO TIRADO

 

…y abriendo otros; nuestro título pudiera dejar entrever cierta mirada pesimista o, cuando menos, ambigua. Pero no, no es así. Los caminos que estamos llamados a cerrar, ante la inminente Pascua, son aquellos que también reprodujeron los Doce, las primeras comunidades y los creyentes contemporáneos.

Durante estos días, estamos escuchando relatos de la Pasión que nos hacen mirar, inevitablemente, a un espejo. Rivalidades, envidias, ansias de poder, miedos, discusiones, desafíos, problemas, cómo agradar a los “cabecillas” de la parroquia, etc. son algunos ejemplos que repetimos en la Iglesia, pero también, de otro modo, en nuestras relaciones sociales.

Pero hay una actitud que puede pasar desapercibida y que en el evangelio de hoy se dice explícitamente, aunque tuvo que atravesar todos los momentos de estos relatos de la Pasión y, seguramente, muchos momentos de la vida de Jesús y sus discípulos: la perplejidad.

Pero si bien, nos centramos siempre en la figura de Judas y su desatinado acto de entrega, cabría preguntarse más ampliamente: ¿qué causa más perplejidad? ¿Que alguien le vaya a entregar para que lo maten o que Jesús tenga una conciencia tan clara de lo que está ocurriendo?

Sin duda, podemos extraer una lección de vida, siempre en distonía con la sociedad: ¿cabe esperar una actitud serena que no presenta ni rechazo ni cólera como la de Jesús? ¿Cómo nos comportamos ante las traiciones a las que nos someten familiares, amigos y otras relaciones?

Pero también nos debería causar cierta perplejidad el hecho de que su grupo no articule ninguna reacción en su defensa. ¿Y nosotros? Ante los desprecios, traiciones, abandonos de todo gesto de humanidad, ¿qué hacemos? Cuando el ser humano es despojado de su dignidad, se le vuelve a traicionar, abandonar, entregar en el mismo Jesús. Cabría preguntarse cuál es nuestra implicación con las tragedias de Ucrania, Palma, el aumento de la falta de nutrición de las poblaciones durante la pandemia…

¿Y perplejos por las contradicciones personales de Pedro, que son las nuestras? Un gran e intenso amor frente a la negación y desentendimiento. ¡Cuántas veces hemos amado y dado la espalda solo por conveniencia!

Pero estas y tantas otras escenas de apagamiento que vivieron los primeros discípulos, están llamadas a recorrer nuevos caminos, a dejarse atrás para avanzar con nuevos retos. La Cuaresma se acaba y debemos cerrar senderos que impiden avanzar, para retomar veredas que, aunque desgastadas y pedregosas, nos acerquen más a la persona de Jesús.