Texto: Pilar Garrido
Música: Bensound cute
Ofreciendo a los santos
¡Buenos días!
Los madrileños estamos en víspera de fiesta: Mañana 9 de noviembre celebramos la festividad de Nuestra Señora de la Almudena. Durante unos años en el colegio San Agustín de Madrid, hemos tenido una bonita tradición que consistía en que los niños que se preparaban para hacer la Comunión, hicieran de parte de toda la familia agustiniana, la ofrenda floral a nuestra Patrona. Lamentablemente con la pandemia todo paró.
Y empecé a pensar que ya que no íbamos a ofrecer algo material como son las flores, podíamos ofrecer otra cosa a la Virgen y se me ocurrió, hilando fino, que como noviembre es el mes de los Santos, el ofrecimiento podía ser la vida de los santos, de esos “santos de nuestra puerta de al lado” como dice el Papa Francisco.
Todos tenemos en nuestro recuerdo personas que han vivido y viven haciendo el bien, en silencio, con humildad, sin esperar nada a cambio. No son conocidos, no salen en las redes, ni en las noticias, pero cuando les hemos necesitado siempre han estado ahí, porque sabían que debían de hacer el bien sin excusas, porque en una palabra eran buenos.
Personas que han caminado a nuestro lado, con una vida aparentemente corriente y que han dejado un gran vacío. De cuantos padres, amigos, vecinos o conocidos, sentimos su huella en nosotros, porque nos supieron trasmitir buenos valores y también que amar a Dios y al prójimo como a un mismo es el mayor mandamiento y regalo que nos ha dejado nuestra fe. A través de ellos podemos aprender el valor del Amor, con mayúsculas, ese amor que nos hace libres, porque el que ama de verdad, aunque le fallemos siempre, nos va a perdonar; y ese es el verdadero valor de la libertad, el perdón tras el error.
María quiero poner en tus manos la vida de todos estos Santos que solo Tú y Tu Hijo conocéis, que sigan siendo ejemplo para nosotros para que un día también podamos ser esos santos de a pie, “santos de al lado”
Buenos días