Luz para iluminar

Publicado el 15/11/2022
Agustinos

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Texto: Santiago  Alcalde, OSA
Música:  Bensound adaytoremenber

Las tres candelas

 Tres candelas iluminaban una habitación oscura y llena de variados objetos. La estancia estaba tan silenciosa que podía oírse el diálogo que las candelas mantenían entre sí. La primera de ellas dijo: “Yo soy la fe. En este mundo tan oscuro, como en el que vivimos, ya no puedo iluminar. Los hombres rechazan a Dios y no quieren mi luz”. Y disminuyendo su llama, se apagó totalmente.

            La segunda vela dijo: “Yo soy la caridad. El mundo está lleno de cosas buenas y hermosas, pero los hombres no quieren compartirlas. El amor ha muerto y no tiene sentido que yo siga luciendo”. Tras estas palabras, un leve soplo se abatió sobre ella y dejó de lucir.

De repente, un niño entró en la habitación y encontró las dos velas apagadas. “¿Qué es esto? ¿Qué está pasando aquí?”, preguntó. “Se supone que las tres debéis estar encendidas para iluminarlo todo hasta el final de los tiempos”. La tercera vela, la esperanza, entonces, dijo: “No te preocupes, ni tengas miedo, yo no me apagaré. Siempre que yo esté encendida, de mí se podrán encender las otras dos candelas”. El niño entonces, tomando en sus manos la vela de la esperanza, encendió nuevamente las dos velas que se habían apagado.

A pesar de la oscuridad que nos rodea y de la creciente falta de solidaridad, cada uno mantengamos las tres velas encendidas y, como Cristo, seremos luz del mundo para todos.