Texto: Clara de Mingo
Música: Bensound cute
Madre
Mes de mayo, mes de María. Si bien es un mes rechazado por muchos (como los alérgicos o los estudiantes), es el mes de nuestra Madre. Pero ¿por qué mayo? Si la Iglesia sigue recordando la Resurrección de Jesús y preparando Pentecostés, ¿por qué se estableció como mes de María?
Supuse que se debía al tema de las flores y demás, pero como no estaba segura al 100%, pues me puse a investigar, y tenía razón al 50%. Al contrario que otras tradiciones o momentos litúrgicos, como la Navidad o la Pascua que tienen varios siglos de antigüedad, este solo tiene dos.
El comienzo del buen tiempo, la primavera, la naturaleza verde y las flores reflejan rasgos que nos habla de María, de su belleza, de su alegría, de su virtud, de la vida.
Por otra parte, en la Grecia y Roma clásicas ofrecían flores y oraciones a las diosas de la fertilidad, Artemisa y Flora para celebrar el inicio de la primavera. Por tanto, en sus orígenes, también se buscaba darle un sentido cristiano a este mes y estación en particular. Sin embargo, hasta el siglo XII, se comenzó a celebrar este mes de María entre agosto y septiembre; y ya fue en el siglo XVII cuando se instauró definitivamente el mes mariano en mayo.
La celebración de este mes de mayo es más que una costumbre entre los creyentes, es un gesto de gratitud y un homenaje a María. Una de la tradiciones que más arraigadas que tenemos son las ofrendas florales o el rezo del Rosario.
Quizás en uno de mis primeros recuerdos del colegio son las canciones y la ofrenda de las flores que hacíamos cada año en la capilla del colegio. Y el viernes pasado, con los chicos de los grupos Tagaste, repetimos ese gesto, con los catecúmenos unidos, gritando a pleno pulmón "MADRE, MADRE". Quizás no lo entendían o no lo entendemos, quizás no era una ofrenda como la de la Mare de Déu dels Desemparats, que hacen nuestros hermanos de Valencia, pero la devoción hacia nuestra Madre es única.
Querida Madre, en el Evangelio de hoy, tu Hijo nos dice: "el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante". Que sigamos tu ejemplo, permaneciendo, confiando, orando, siendo fieles, para dar fruto abundante.
Como dice la canción, al mirarte pude comprender que una madre no se cansa de esperar. Acuérdate de mí cuando dude, no me sueltes de la mano, y ayúdame a ser más humilde, más sencillo, como tú.
Santa María, madre del Buen Consejo, madre de todos los hombres, ruega por nosotros.