Nuestros mayores, nuestros mejores

Publicado el 15/06/2023
Agustinos


🎧 Audio Reflexión

TEXTO: Quique Infante


MÚSICA: Claro de Luna (Beethoven) – Richard Clayderman

Nuestros mayores, nuestros mejores

¡Buenos días!

Hoy es 15 de junio y la ONU celebra el “Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez”. Un día para reflexionar y concienciarnos de que muchos de nuestros mayores, cuando llegan a lo que llamamos su “edad dorada” en realidad no pasan por su mejor momento.

Para muchas culturas, la palabra “anciano” no se relaciona con “estropeado”, “decrépito” o “viejo”, sino con todo lo contrario. Se anteponen los aspectos positivos que aporta la experiencia y la sabiduría frente a los inconvenientes que genera un cuerpo castigado por el paso de los años. Estar cerca de un sabio y empaparnos de su conocimiento es un privilegio y un honor que compensa, con mucho, el esfuerzo de suplir sus carencias físicas con nuestros cuidados.

Poder devolver el cariño recibido por nuestros ancianos durante toda nuestra vida es un premio mucho más grande que el trabajo que nos piden en su necesidad.

Hace años fueron ellos…

  • los que nos ayudaron a andar cuando nuestras piernas aún eran un amasijo de huesos torpes y músculos difíciles de controlar;
  • los que nos ayudaron a comer ante nuestra incapacidad de hacerlo solos;
  • los que nos llevaron a los sitios a los que no podíamos desplazarnos solos;
  • los que se ocuparon de averiguar mediante nuestros gestos y emociones qué es lo que necesitábamos ante nuestra incapacidad de hablar;
  • los que se afanaron porque nuestros cuerpos estuvieran sanos y relucientes antes nuestra imposibilidad de que nosotros nos ocupásemos;
  • los que organizaron nuestras medicinas y no dejaron pasar ni una toma;
  • los que se despertaron tantas veces como fue necesario para que no nos sintiéramos desamparados al desvelarnos;
  • los que antepusieron días y noches de planes, viajes y demás diversiones para cuidarnos, acompañarnos y querernos;
  • los que se acercaban a nosotros cuando nos veían “carucha” y encontraban la manera de hacernos sonreír.

Muchas de esas cosas -las vueltas que da la vida- son las que necesitan ahora nuestros padres y abuelos, nuestras madres y nuestras abuelas. En los casos más privilegiados, nuestras bisabuelas y, en muchos casos, nuestros tíos y tías que tenemos muy cerca. Así que es nuestro turno. Ahora nos toca a nosotros. Repasa la lista de arriba y seguro que se te ocurren unas cuantas cosas que hacer, que a tus mayores hoy le harán la vida mucho mejor.

¡Buenos días!