Enreda un poco

Publicado el 29/11/2023
Agustinos

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Texto:  Enrique Infante
Música:  Bensound cute

Enreda un poco

El refranero nos recuerda que "Noviembre, dichoso mes, que empieza con los Santos y acaba con San Andrés". Así nos despedimos de noviembre, acercándonos al día de San Andrés.
San Andrés, el discreto hermano mayor de San Pedro, ocupa una posición de gran estima como el primer patriarca de la Iglesia Ortodoxa, equivalente a lo que representa su hermano Pedro para los católicos.
Nos encontramos por primera vez con San Andrés en los Evangelios en una escena que ilustra de forma elocuente su total compromiso con Jesús. Un compromiso que no requirió palabras: mientras pescaban, Jesús se acercó a él y a su hermano Pedro y les dijo: "Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres". 
Sin vacilación, sin condiciones, dejaron sus redes y le siguieron, movidos por una fe profunda que, aunque no podían entender ni expresar en palabras, no cuestionaron en sus corazones.
Esta llamada a ser "pescadores de hombres" nos resuena todavía hoy. En homenaje a estos santos pescadores, reflexionemos hoy sobre cómo, en la era digital, disponemos de una herramienta para pescar; la red de todas las redes: Internet.
Los medios digitales se han transformado en el escenario principal de nuestras vidas cotidianas. Aunque en ocasiones podemos perdernos navegando sin rumbo o consumiendo contenido irrelevante, también es verdad que Internet nos brinda la oportunidad de conectar con innumerables personas. De hecho, ahora estás leyendo estas palabras en tu dispositivo gracias a la conectividad que nos proporciona la red, una alternativa moderna a estar físicamente en una iglesia para escuchar un sermón (que no es el caso, por cierto).
Así que una buena parte de esas horas que dedicamos a “navegar” podríamos hacerlo con la barca fondeada y la red bajo el agua. Porque nuestros comportamientos y mensajes en redes sociales, nuestros comentarios y tonos en los grupos de Whatsapp -con la familia, los amigos o incluso en algún caso con personas poco conocidas- se convertirán en nuestro vivo retrato. 
Podemos ser los “nubenegras” que solo ven el lado oscuro de las cosas; la “vieja del visillo”, criticando y cotilleando siempre que podemos; los “calimeros” que solo usamos el teclado para escribir nuestras penas y quejarnos; los “bocachanclas” que no dejamos títere con cabeza y, muchas veces, los “tapaos” que se esconden detrás de un mensaje escrito para soltar aquello que no nos atrevemos a decir a la cara o -peor aún- los que “rajamos" de forma anónima.
O, por el contrario, podemos ser los que animan los chats; aquellos que se inventan formas divertidas y colaborativas de rezar en grupo; los que llenan sus mensajes de manitas juntas mientras encomiendan las necesidades de alguien; esos que “responden en privado” para ayudar alguien que "ha sacado los párrafos del tiesto”; esos amigos que no dejan de usar el emoji del beso; los que no dudan en enviar un texto, un vídeo o un “meme” que creemos que puede ayudar alegrar el día a los que lo leen; los que cambian de tema cuando “la cosa se calienta”; esos maravillosos frikis que nos despiertan con un “buenos días” y un mensaje positivo...
En definitiva, podemos enredar “metiendo discordia o cizaña” o podemos enredar “atrayendo e implicando en mensajes, comunidades y comportamientos positivos”.  
La red ya la tienes y la sabes usar. Ahora decide cómo quieres enredar con ella.

¡Buenos días!