"Promover las misiones"
Hoy vamos a concluir lo que os estaba contando sobre los agustinos y las misiones.
Todo comenzó hace dos viernes, cuando os señalé que las misiones son muy importantes para la Orden de San Agustín. Le corresponden por su propia naturaleza de ser Iglesia y por su propia historia y tradición.
El viernes pasado os comenté que, para ir a las misiones, el misionero agustino tiene que preparar bien el cuerpo, el espíritu, el carácter, la mente, las aptitudes que tiene. Y, todo esto, porque es enviado a lugares alejados del propio, con otra lengua, cultura, costumbres.
Para terminar, hoy os quiero hablar de otros tres aspectos que los agustinos consideran muy importantes para la vida y el trabajo en la misión.
En primer lugar, es necesario que los misioneros, en los lugares de misión donde se encuentran, puedan retirarse en tiempos determinados para restablecer fuerzas, realizar ejercicios espirituales, participar en retiros-convivencias. El estilo de vida que llevan los misioneros, y el trabajo que realizan es duro y exigente. Necesitan reponerse en el cuerpo y en el espíritu.
En segundo lugar, hay que promover las misiones de la Orden, tanto para hallar nuevos misioneros, como para procurar ayudas espirituales y materiales.
Por último, los misioneros tienen la tarea de suscitar, con la gracia de Dios, vocaciones propias de los lugares donde se encuentran, ya sean para ser sacerdotes diocesanos o para consagrar la vida al Señor como agustinos en la Orden de San Agustín.
(Constituciones de la O.S.A. 173-175)