El valor de la caridad
“Lo que nos manifiesta que estando arraigados y cimentados en la caridad, podemos comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la altura y la profundidad, esto es, la Cruz del Señor, donde se entiende por anchura el madero transversal en que se hallan extendidas las manos; por longitud lo que hay desde la tierra hasta este madero, y en ella se fija todo el cuerpo de manos abajo; por altura, desde la anchura hasta lo más alto hacia arriba donde se apoya la cabeza; por profundidad, lo que metido en la tierra se oculta a nuestra vista. En este signo de la Cruz se encierra toda la vida cristiana, como es el obrar bien en Jesucristo, el estar continuamente unido a El, el esperar los bienes del cielo, el no divulgar los divinos misterios”. (De doctrina christiana, II, XLI, 62).
Sobre ancho madero transversal
tienes, Jesús, sujetas tus manos
esperando vengan los humanos
a cerrar la herida del Coral.
Recio tronco con dolor plantado
fructífero fue, callado y manso;
eres hoy, en la mudez, remanso
de sarmiento y fruto sazonado.
Tu raíz rezuma caridad
venida a la luz por tus heridas;
vestida de amor y de humildad
ejemplo es de entrañas ateridas.
¡Que grande es tu oferta, tu consuelo:
tu silencio nos habla del cielo!
Nazario Lucas Alonso