Píldoras de San Agustín

Escrito el 05/06/2023
Agustinos


 

Hola qué tal, cómo estás.

Este domingo pasado hemos celebrado los cristianos la solemnidad de la Fiesta de la Santísima Trinidad, del Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo. La gran familia divina unida en el amor.

Y este amor divino lo hacemos presente en nuestro mundo terrenal a través de Cáritas, de la caridad hacia todo aquel necesitado. Es una gran semana de amor, de caridad en la Iglesia, que gira alrededor de la fiesta del Corpus Christi.

Sí, el Cuerpo de Cristo, formado por los seres humanos de todos los tiempos, sin distinción de edad, raza, condición social, económica, política… que tienen en común la fe en Dios Padre, Hijo, Espíritu Santo y un inquebrantable amor a los demás, en especial a quien más lo necesita, en cualquiera de las dimensiones de la vida.

Pero ¿quién puede decir que no necesita algo, que no necesita a alguien en su peregrinación por este mundo? Agustín nos invita a entender que Dios nos ha creado a todos por igual, no a unos sí y a otros no. Y que esta creación por igual tiene sus implicaciones.

Así nos dice el santo de Hipona:  

“Dios ha creado tanto a los ricos como a los pobres. Los ricos y los pobres, por tanto, han nacido iguales. Encuentras a otro como tú y camináis juntos. No oprimas ni defraudes a nadie Uno puede estar en la necesidad y otro tener bienes en abundancia. Pero el Señor ha creado a ambos. Por medio de la persona que tiene, él ayuda a aquél que está en la necesidad; y por la persona que no tiene, pone en prueba al que tiene”.

(Sermones 35, 7)

Oración

“¡Señor, tú eres la luz de mi corazón y el pan de la boca de mi alma! ¡Tú eres la virtud que mora en mi mente y el lugar más profundo de mis pensamientos”

 (Confesiones 1, 13)