Sabías que…

Escrito el 09/08/2024
Agustinos


 

"Roma despierta (I)"

San Agustín tiene que enfrentarse a lo largo de su vida contra los paganos que no han dejado de serlo, y contra los nuevos cristianos que, en el fondo, siguen siendo paganos. Y este enfrentamiento se puede constatar cuando se leen los sermones del santo.  

Recordamos como, poco a poco, en los primeros siglos del cristianismo, quienes antes corrían a los templos paganos, ahora se agrupan en iglesias cristianas. Quienes antes buscaban la salud del cuerpo en los dioses paganos, ahora recurren a Cristo, médico del cuerpo y del alma. Así, a los héroes del paganismo les sustituyen los mártires cristianos.

Para el obispo de Hipona, que muchos de los nuevos cristianos, en el fondo, siguen siendo paganos, lo nota en la forma que tienen de pensar, de actuar. El domingo sí, se manifiestan como cristianos cuando van a misa a escuchar al obispo, a darse golpes de pecho, a reconocerse pecadoras. Pero, el resto de la semana, viven como paganos, no se acuerdan de la Iglesia, ni del obispo.

Un acontecimiento marca la vida de la gente de aquella época, así como la historia del mundo hasta entonces conocido. Es el saqueo de Roma el 24 de agosto del 410 por las tropas del godo Alarico, y que supone el comienzo de la caída del imperio romano.

En Hipona, tanto cristianos como paganos se estremecen ante dicho acontecimiento y toda la violencia que trae consigo. Los paganos piensan que la caída de Roma se debe al abandono del culto a los antiguos dioses y, los cristianos, dudan de su fe y se preguntan si no es mejor volver a adorar a los dioses de sus padres.

Esta situación tan calamitosa le lleva a Agustín a escribir la obra “La Ciudad de Dios”, que consta de veintidós libros, y en cuya redacción empleó 14 años. A través de sus muchas páginas quiso dar respuesta a paganos y cristianos sobre los acontecimientos acaecidos.

Pero, de esta obra hablaremos en otra ocasión, en nuestro espacio “Sabías que…”