Para ti Jesús, no basta con el mandamiento "no matarás".
Tenemos, además, que quitar toda agresividad, desprecio al otro,
los insultos y las venganzas.
Para ti Jesús, las palabras al hermano han de ser dichos con amor y respeto,
sin crear más divisiones ni violencia.
Nosotros queremos vivir en Ti, Jesús. Ser de los tuyos. Caminar detrás de Ti.
Tú Jesús eres nuestro Camino y la luz que andamos buscando.
Danos siempre, Señor, La Gracia de seguirte y vivir buscando en todo el bien de los demás,
y la llegada de tu Reino. Amén.
Ángel María Lahuerta Millas