(Basado en un texto de José María Escudero)
1ª parte
Estamos en el mes de agosto y te proponemos algunos destinos paradisiacos para tu fe y vocación. En estos lugares podrás estar a tus anchas, encontrarás amigos de verdad y tendrás experiencias y sensaciones únicas. El único requisito para llegar a ellos será la Palabra de Dios, que quiere hacer escala en tu corazón ¿Te animas? ¡Buen viaje!
LUGAR 1: Escuela de vida (Nazaret: Lc 1-2)
En este lugar te matricularás, por el tiempo que quieras, teniendo como maestra y amiga a la familia de Nazaret. Si estás atento a sus palabras, a sus gestos, a sus miradas… regresarás con la maleta cargada hasta los topes de sabiduría y de felicidad.
LUGAR 2: Rincón de la luz (Belén: Lc 2,1-20)
Lo difícil no es dar a luz a un hijo; lo realmente complejo y hermoso es darle luz todos los días… Aquí te encontrarás con la LUZ, con mayúscula. No abandones este mágico lugar sin pedir a Jesús que te ilumine todos los días de tu vida.
LUGAR 3: La laguna de la valentía (Lago de Galilea: Mc 1,16-20)
No pasees por su orilla metiendo solamente los pies… Ve hasta donde más cubre. El Salvavidas del lago estará pendiente de ti y no te quepa ninguna duda de que te llamará por tu nombre y te salvará.
LUGAR 4: La gran fiesta del servicio (Caná de Galilea: Jn 2,1-11)
¡Vaya cara que se te ha puesto! Te invitan a una boda y tienes que hacer de camarero… No te preocupes, pues asistirás a un prodigio que cambiará tu vida. Y es que solo desde el servicio, la ayuda desinteresada, podrás contemplar las maravillas que el resto de invitados se perderán.
LUGAR 5: El chiringuito de la fraternidad (Cafarnaúm: Mt 9,1-8)
Aunque estés de vacaciones mira a tu alrededor, alguien te necesita; arrima hombro y corazón y échale una mano. Descubrirás y experimentarás la enorme felicidad que surge al poner tus talentos al servicio de tus hermanos más débiles.