P. Tomás Rodríguez
Primer General español
El P. Tomás Rodríguez fue el primer prior general español de la Orden de S. Agustín. Aunque los agustinos españoles constituían un grupo muy numeroso de religiosos, habrá que esperar a 1893, en que se volvieron a unir los españoles a la orden, tras el paréntesis de la “Bula inter graviores”, para participar activamente en la dirección de la misma. Los agustinos españoles que ocuparon el cargo de prior general son estos: P. Tomás Rodríguez, Eustasio Esteban, Luciano Rubio, Miguel A. Orcasitas y el actual, P. Alejandro del Moral.
El P. Tomás había nacido en Villanueva de Abajo, provincia de Palencia, el 7 de marzo de 1852, y entró en la orden de San Agustín en el Real Colegio Seminario de Valladolid, donde emitió los votos en 1869. Realizó su carrera eclesiástica en el citado colegio de Valladolid y en el monasterio de Santa Mª de La Vid. Fue ordenado de sacerdote en La Vid en 1876, siguiendo en ella como lector hasta 1885. Al recibir la Provincia de Filipinas el monasterio de El Escorial el año 1885, fue destinado como profesor en el colegio Alfonso XII.
En 1892 pasó al centro de estudios superiores María Cristina como director espiritual y dirigió la revista “La ciudad de Dios”. Dos años después fue destinado a Filipinas, pero en el capítulo general de 1895 fue elegido procurador general de la orden, trasladándose a Roma. Al año siguiente fue elegido vicario general, y al ser nombrado obispo el prior general P. Martinelli en 1898, el papa León XIII eligió al P. Tomás Rodríguez para el máximo cargo de prior general. Fue reelegido en los capítulos de 1907 y 1913, permaneciendo en el cargo hasta 1920, aunque se retiró un año antes, debido a su enfermedad, muriendo el 2 de abril de 1921en la casa enfermería de Barcelona a los 69 años.
Durante su gobierno se sucedieron acontecimientos muy graves para la orden, como la expulsión de los agustinos de Filipinas en 1898 y la separación e independencia de los Agustinos recoletos en 1912. Otros fueron más positivos, como la recuperación de la basílica y convento de Pavía, del convento de Viterbo y la creación del colegio internacional de Santa Mónica en Roma, cuyo primer curso tuvo lugar el año 1906. Se fundó la revista Analecta Agustiniana, y durante los años de su generalato fueron canonizados varios santos agustinos, como Santa Rita, Esteban Bellesini, Santiago de Viterbo y Federico de Ratisbona.
En los más de veinte años en el gobierno de la orden realizó una actividad ingente, visitando varias veces las provincias por todo el mundo. Intentó paliar la situación de varios cientos de religiosos expulsados de Filipinas, facilitando su expansión por América y España. También contribuyó a reforzar la grave situación de varias provincias agustinas de Hispanoamérica, como las de Colombia, Ecuador y Perú, para lo que se enviaron muchos agustinos que salieron de Filipinas. En Italia consiguió la recuperación de varios conventos y santuarios, como Genazzano. También visitó Inglaterra e Irlanda, donde estuvo varios meses enfermo. De vuelta a Roma reemprendió las visitas a las provincias italianas y de otras partes de Europa.
Para el P. Tomás Rodríguez fue muy triste conocer el breve del papa Pío X, de fecha 16 de septiembre de 1913, por el que se constituyó la orden de los agustinos recoletos. Ese mismo año se celebró el capítulo general, en el que fue reelegido prior general el P. Tomás Rodríguez. Dedicó mucho empeño en actualizar el martirologio agustiniano y los ritos de las misas de la orden y otros documentos litúrgicos propios.
En mayo de 1919 se resintió de su enfermedad y se trasladó a España para residir en la casa-enfermería de Barcelona y nombró al comisario general P. Canicio O´Gorman para que hiciera sus veces. El capítulo general se celebró en abril de 1920, mientras el general seguía en Barcelona y entregaba los sellos fue elegido general el P. Tomas Giacchetti.
El P. Tomás Rodríguez falleció el 2 de abril de 1921 en la enfermería de Barcelona, a los 69 años de edad. Fue un superior providencial para los agustinos españoles en un momento en que nacieron las provincias de Castilla y Matritense, y tras la unión de los agustinos españoles a la orden en 1892. A los numerosos agustinos que se vieron obligados a salir de Filipinas les ayudó a que llevaran su actividad misionera por varias repúblicas americanas y establecer numerosas residencias y colegios en España.
En el campo de los estudios propuso y consolidó el colegio internacional de Santa Mónica en Roma, comprometiendo a las provincias a que enviaran profesos a terminar allí su formación. Creó la revista “Analecta Agustiniana” en 1905, que fue el órgano oficial de información y cultura de la orden. En sus primeros años en España colaboró y dirigió la revista científica “La Ciudad de Dios”, que había sido fundada en 1881. En 1914 se inició la publicación de la revista histórica “Archivo Histórico Hispano Agustiniano” para las provincias españolas, que posteriormente se llamará “Archivo Agustiniano”.
Fr. Ricardo Paniagua