"1244 - 1518: Esplendor y decadencia" (2ª parte)
Recordamos que la Orden de San Agustín, fundada en 1244, se extendió poco a poco por Europa. Llegó un momento que había unos 300 conventos y el número de religiosos estaba entre dos mil y tres mil. A partir del año 1350, comenzó la decadencia de la Orden.
Las causas de esta decadencia fueron la enfermedad de la peste negra que causó la muerte, en tres años, de más de 5.000 agustinos y el Cisma de Occidente.
Para hacer frente a esta situación de decadencia en la Iglesia y en las propias Órdenes religiosas, nacieron las Congregaciones de observancia. En el caso de los agustinos, fue el comienzo de lo que hoy conocemos como la Orden de los Recoletos.
Desde siempre, un aspecto muy importante en la vida de los agustinos ha sido el tema de los estudios. Estudiar, ser sabio, es una herencia recibida de San Agustín y un instrumento al servicio de la contemplación y el apostolado.
Recordamos que, el primer lugar de estudio ya organizado como tal en la Orden, es del año 1259 y estaba en París.
Teología, filosofía, espiritualidad…. son campos del saber en los que van destacando los agustinos, quienes se afanan en sacar títulos académicos. Se puede afirmar que, del año 1350 al 1380, los agustinos ocupan el primer lugar entre las órdenes religiosas que cuentan con religiosos preparados y titulados.
Podemos señalar también que los agustinos tuvieron grandes representantes entre los cultivadores del humanismo, un movimiento filosófico, artístico y cultural surgido en la Europa de los siglos XIV y XV.
Este movimiento privilegió el estudio de las ciencias, con especial interés en todas aquellas materias que tuvieran como fin desarrollar los valores del ser humano.
Como hemos podido ver, en estos siglos los agustinos se presentan como grandes estudiosos. Ahora bien, no sólo hicieron esto, sino que también se dedicaron al apostolado directo con la gente, pero de esto hablaremos en nuestro próximo encuentro de “Sabías que…”