Trinidad en el hombre
“En consecuencia, encontramos una trinidad en el hombre: la mente, la noticia que le lleva a su conocimiento y el amor con que se ama”. (San Agustín: De la santísima Trinidad, XV, 7, 13).
Sol, luz y calor llenan la mañana;
color, aroma, finura, la rosa;
volar, jugar, vivir, la mariposa;
melodía, ritmo y son, la pavana.
Inquietud, y sabor, e inmensidad
esencia sois de las aguas marinas,
obra creada por manos divinas
en un acto de libre voluntad.
Reflejos de familia creadora
en cuyo nombre el Padre Dios actúa
señalando al humano con su impronta:
la mente, creativa y soñadora,
feliz memoria que en la mente actúa,
amor fiel que la acción de amar afronta.
Nazario Lucas Alonso