"Auténticos héroes, lo trabajadores humanitarios "
El 19 de agosto de 2003, un atentado bomba en el hotel Canal de Bagdad (Irak), se cobró la vida de 22 trabajadores humanitarios, entre ellos la del Representante Especial del Secretario General de la ONU para Iraq. Cinco años más tarde, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió designar el 19 de agosto como Día Mundial de la Asistencia Humanitaria.
El objetivo principal que se busca con esta conmemoración es rendir un especial homenaje a todos los profesionales de la salud y trabajadores humanitarios que, a pesar de las dificultades, siguen trabajando en favor de la vida de millones de personas en todo el mundo, así como también, a todos aquellos que han sido asesinados cumpliendo su deber.
No olvidemos que los trabajadores humanitarios no tienen otro propósito que salvar y proteger vidas, así como auxiliarles atendiendo sus necesidades básicas. Y, esto, en cualquier lugar del mundo y sin que importe la nacionalidad o el grupo religioso o social al que pertenezcan los afectados.
Son ellos los que trabajan codo a codo con las comunidades a las que sirven y brindan esperanza en su día a día. La mejor manera de garantizar que los trabajadores que prestan asistencia humanitaria puedan cumplir su misión es promover la conciencia y el respeto por los principios que sustentan la labor de ayuda: humanidad, imparcialidad, neutralidad e independencia.
Actualmente, la comunidad internacional confía a las Naciones Unidas la coordinación de las operaciones de asistencia frente a los desastres naturales o provocados por el ser humano, en las zonas donde la capacidad de las autoridades locales no es suficiente para hacer frente a la situación.
Por ejemplo, en el año 2024, UNICEF actuó en 448 situaciones de emergencia en 104 países, siendo du misión garantizar los derechos de la infancia a la supervivencia, la protección y la educación.
Y, junto con el dinero necesario para actuar en las situaciones de emergencia, lo importante es que la humanidad cuenta en estos momentos con auténticos héroes, los trabajadores humanitarios.