"Un desafío humanitario y económico"
Huérfano es aquel menor de edad cuyos progenitores han fallecido o lo han abandonado. Según datos de UNICEF del año 2017, por aquel entonces había más de 140 millones de huérfanos en el mundo.
Ante esto, el segundo lunes de noviembre de cada año, tiene lugar el Día Mundial de los Huérfanos, una jornada dedicada a sensibilizar y concienciar a la población de todos los países, acerca de la difícil situación de los huérfanos y los niños desplazados en todo el mundo.
La creación de este día fue iniciativa de la Fundación Estrellas (The Stars Foundation), que es una organización sin ánimo de lucro con sede en Nashville, Tennessee (Estados Unidos). Su objetivo es recaudar fondos y crear conciencia sobre la difícil situación de los niños huérfanos o desplazados por la pobreza, la guerra, el SIDA y los desastres naturales. Los fondos que consigue los distribuye a organizaciones sin ánimo de lucro y ONG de ayuda humanitaria.
Para dicha Fundación, la crisis de los huérfanos es un desafío humanitario y económico que nuestra sociedad global debe abordar con urgencia. Los niños frágiles y vulnerables que quedan tras las guerras, los desastres naturales y la hambruna crean una pobreza que no tiene fondo.
Algunos datos sobre la realidad de los huérfanos: hay más de 53,1 millones de huérfanos solo en el África subsahariana.; 2.102.400 niños más quedan huérfanos cada año solo en África; 400.000 huérfanos mueren cada año por desnutrición; el 99% de los huérfanos nunca serán adoptados; se estima que más de 1,2 millones de niños son objeto de trata cada año en todo el mundo; 20 millones de niños quedan huérfanos en la India; de los 21,3 millones de refugiados en todo el mundo, la mitad son menores de 18 años
Por eso, para fortalecer los ideales de buena voluntad humanitaria hacia los huérfanos, es necesario que las organizaciones no gubernamentales mundiales, las organizaciones de ayuda humanitaria, los grupos cívicos y las personas, celebren el Día Mundial de los Huérfanos de una manera diversa y eficaz.
Para ello, hay que llevar a cabo actividades, tanto de sensibilización como de captación de recursos económicos, con el fin de ayudar a orfanatos o a otras instancias vinculadas con niños y jóvenes en situación de orfandad, para mejorar sus condiciones de vida.